Las estufas de este tipo son autónomas porque el
pellet contenido en el depósito se descarga a la cámara con frecuencia
programada y sin intervención del usuario. Y son modernas porque se encienden
automáticamente y se regulan con mandos digitales o a distancia. Se utilizan
para calefactar directamente la estancia donde están instaladas o para
canalizar el aire caliente hacia otros espacios de la vivienda, siempre con
alta eficiencia térmica. Las estufas de pellets se presentan en diferentes
tamaños con distinta potencia y estética, lo que permite integrarlas en
cualquier ambiente.
Características principales de las estufas de pellets:
- Control automático
y manual de la velocidad de los ventiladores programado por el usuario.
- Brasero de hierro
fundido.
- Puerta de la cámara
con bastidor en hierro fundido y cristal de cerámica panorámico y
autolimpiante.
- Amplia superficie
de transferencia de calor con intercambiador superior y bastidor frontal
de hierro fundido.
- Limpieza automática
del brasero para mantener constante la combustión y reducir el
mantenimiento.
- Diagnóstico de
alarmas y asistencia de fácil interpretación y solución.
- Hasta cuatro
idiomas de interfaz con el usuario.
- Amplia superficie
acristalada para ver mejor la llama.
- Posibilidad de
conexión con termostato/cronotermostato externo con cable.
- Cajón cenicero
extraíble.
- Pies regulables en
la base del aparato para nivelarlo en suelos desiguales.
- Programación
semanal mediante cronotermostato con hasta cuatro encendidos y apagados
automáticos al día.
- Dispositivos de
seguridad: válvula antiexplosión integrada en el intercambiador superior
de hierro fundido, termostato de sobrecalentamiento, depósito de pellets y
depresímetro que garantizan la fiabilidad del aparato.
- Posibilidad de toma
de aire comburente.
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